Pensión Garantizada Uniforme (PGU)

Es la principal herramienta del pilar solidario del sistema de pensiones chileno y reemplaza a la pensión básica solidaria y el aporte previsional solidario. Busca mejorar las pensiones a las personas actualmente jubiladas y las que van a jubilar en el futuro, a través de un aporte del Estado. La PGU es administrada por el Instituto de Previsión Social (IPS).

La PGU incluye un aporte del Estado de hasta $185 mil mensuales, a todas las personas, que cumplan las siguientes condiciones:

  1. Tener más de 65 años
  2. No ser parte de una familia que pertenezca al 10% más rico, dentro de aquellas
    personas que tienen más de 65 años.
  3. Acreditar residir en Chile por no menos de 20 años.
  4. Tener una pensión autofinanciada menor a $1 millón.
    El beneficio se pierde por:
  5. Fallecimiento de la persona beneficiaria, es decir no se hereda.
  6. Si la persona beneficiaria se va a vivir fuera de Chile, por más de 90 días en un año.
    Puede solicitarlo nuevamente si vuelve a vivir por más de 270 días en un año.
  7. Si mintió en los antecedentes.
  8. Si la persona beneficiaria pasa a ser parte del 10% más rico, dentro de los que
    tienen más que 65 años.
  9. Si la persona deja de cobrar la PGU por seis meses se suspende el beneficio.

Los montos de que recibe cada persona beneficiaria dependen de su pensión. Quienes tengan una pensión “base” de 630 mil pesos, o menos, recibirán el total de la PGU, es decir $185.000. Quienes tengan pensiones mayores, recibirán montos menores. El monto de la PGU se reajusta por inflación cada 1 de febrero.