¿Qué es el largo plazo?
Cuando partí trabajando en inversiones, me di cuenta de que es un mundo que está lleno de términos complicados, que muchas veces nos aburren, confunden, o incluso asustan. Con el tiempo uno se acostumbra, e incluso les puede llegar a encontrar la gracia, al punto de querer dedicar la vida a esto.
En este sentido, el largo plazo es un concepto que me llama mucho la atención, porque todos queremos ganar mucha plata muy rápido, y cuando nos cuentan que cierta inversión está pensada para el largo plazo, tendemos simplemente a omitirlo, por el atractivo que representa la promesa de rentabilidades altas.
Esto lo he visto fuertemente reflejado en los fondos arriesgados, que cuentan en general con gran porcentaje de acciones, las cuales son consideradas como inversiones riesgosas. A modo de ejemplo, si hubiésemos invertido 10 millones de pesos chilenos en un índice de acciones globales (en este caso, el MSCI ACWI) entre el 20 de febrero y el 20 de marzo de 2020, hubiéramos perdido cerca de $3.000.000, en sólo un mes. Sin embargo, si hubiéramos invertido el mismo monto, pero desde el 12 de octubre de 2018 hasta el 12 de octubre de 2023 (5 años), habríamos ganado cerca de $10.000.000, casi duplicando la inversión inicial. Y eso que estos 5 años incluyen ese mes de caídas del 2020. Este efecto se ve en el gráfico:
Por esto, es muy importante tomarse en serio cuando nos dicen que una inversión está diseñada para el largo plazo. En inversiones de mayor riesgo, si metemos y sacamos plata constantemente nos puede ir muy mal, aún en un año bueno para las inversiones como ha sido el 2023 hasta el momento.
La invitación es a mirar las inversiones más arriesgadas como una inversión en una casa: en general uno no compra un inmueble para venderlo en una semana más si nos damos cuenta de que cae de precio, sino para tenerlo al menos un par de años (o décadas) y después venderlo, cuando haya subido de precio.
* La fuente de datos para los cálculos es Bloomberg, y para convertir la inversión en acciones globales a pesos chilenos se utiliza el dólar observado publicado por el Banco Central de Chile.
